jueves, 24 de noviembre de 2011

LOS DIENTES

Son especie de huesos incrustados en la mandíbula superior e inferior, cuya función es  masticar los alimentos para mejor digestión de los mismos.  
Es un órgano anatómico duro, enclavado en los alvéolos de los huesos maxilares a través de un tipo especial de articulación denominada gonfosis y en la que intervienen diferentes estructuras que lo conforman: cemento dentario y hueso alveolar ambos unidos por el ligamento periodontal. El diente está compuesto por calcio y fósforo, que le otorgan la dureza.
Los dientes son estructuras de tejido mineralizado que comienzan a desarrollarse desde pronta edad y los cuales nos ayudan a masticar alimentos para una buena digestión. El diente realiza la primera etapa de la digestión y participa también en la comunicación oral.

¿COMO FUNCIONA NUESTRA MANDIBULA?

La mandíbula está compuesta por un maxilar superior, que no se mueve porque está fijo al cráneo, y un maxilar inferior, el cual sí se mueve porque está accionado por músculos.
Para que los dientes hagan bien su trabajo bien, necesitan estar perfectamente alineados, esto quiere decir que se superpongan encajando cada diente de arriba sobre el de abajo. Gracias a los músculos y a las articulaciones se puede mover la mandíbula de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha o inversamente. 
Si colocas los dedos en la parte anterior de las orejas, puedes sentir perfectamente el trabajo de la articulación de la mandíbula.

¿CUANTO DIENTES TENEMOS?

Si tienes los dientes completos, incluyendo las muelas de juicio, podrás concluir que la naturaleza dota a los seres humanos de 32 dientes, en la mandíbula, para masticar bien el alimento. 
·        Los dientes inferiores son más fáciles de ver al abrir bien la boca. Ocho incisivos que son los encargados de cortar los alimentos. Cuatro situados arriba y cuatro abajo. Son los primeros dientes que salen. 
·      Cuatro caninos están para rasgar en trocitos alimentos duros como la carne. Dos arriba y dos abajo a cada lado de los incisivos. 
·        Ocho premolares, cuatro arriba y cuatro abajo; 
·        Ocho grandes molares, cuatro arriba y cuatro abajo; 
·   Y a veces cuatro muelas cordales, también conocidas como las muelas del juicio, dos arriba y dos abajo; se encargan de triturar y aplastar el alimento.  

COMO CEPILLAR LOS DIENTES CORRECTAMENTE

Existen varias técnicas para cepillar los dientes, pero la más recomendada por los odontólogos es la Técnica del Dr. Bass. Esta técnica consiste en poner las puntas de las cerdas del cepillo a 45° con respecto del eje dentario, y con un movimiento de ida y vuelta horizontal que abarque dos o tres piezas dentarias a la vez, se consigue la limpieza del surco gingival ( que es la unión entre encía y diente). Esto se realizará en la cara externa de los dientes tanto los superiores como los inferiores, haciendo un barrido. 
La cara interna debe cepillarse desde el límite entre los dientes y la encía hacia el borde libre, con un movimiento de barrido que se logra mediante un giro de la muñeca. La acción ha de repetirse varias veces en cada sector, tanto en los dientes superiores como inferiores.
Para efectuar la limpieza de la cara masticatoria de premolares y molares hay que apoyar el cepillo y efectuar una serie de movimientos circulares de manera que la punta de las cerdas penetre en los surcos y fisuras. El procedimiento debe efectuarse en todas las piezas inferiores y superiores de la dentadura


¿QUE SON LAS CARIES?

Cuando poseemos ya los dientes definitivos, es importante recordar que hay que cuidarlos. La caries es uno de los males más comunes que ataca a los dientes. Para evitar esto es importante cepillarnos los dientes todos los días y hacerlo ¡BIEN!
Los alimentos que ingerimos siempre dejan residuos cada vez que comemos. Aquellos alimentos compuestos por azúcares producen un residuo llamado "el sarro" el cual crea el perfecto ambiente para que se produzca los microbios. 




Estos microbios transforman los azúcares en ácidos, peligrosos para el esmalte de los dientes. Todavía en este momento, un buen cepillado, fuerte y minucioso puede limpiar estos residuos. Si no se lleva a cabo esta limpieza, los ácidos forman un hueco, la caries, el cual poco a poco irá creciendo. Al principio esto no duele, pero cuando llega a la dentina, empieza a doler, puede llegar a doler mucho. Y este es el momento cuando hay que visitar al odontología.